viernes, 12 de octubre de 2012

Biden cumple en su debate

Fueron 90 minutos apasionantes. A diferencia del debate presidencial de la pasada semana, ayer vimos a dos candidatos que tenían los cinco sentidos en derrotar al adversario pero no sólo eso. El vicepresidente Joe Biden y el republicano que quiere quitarle el puesto, Paul Ryan, hicieron exactamente lo que se esperaba de ellos: presentar sus planes y descalificar los del otro, ni más ni menos.

Más allá de esto, yo le anotaría una victoria clara a Biden. La desastrosa actuación de Obama lo hizo posible... Los demócratas necesitaban desesperadamente que un candidato que luchara, que plantara cara, que dijera bien alto todo lo que el demócrata medio piensa de la agenda Romney-Ryan. Y lo hizo, vaya si lo hizo. Sonó auténtico, con buenas respuestas cortas y afiladas, y en ningún momento se dejó arrebatar la iniciativa. En definitiva, fue el "guerrero de la clase media" que Obama debería haber sido en su debate y no dejó pasar ninguna de las oportunidades que su jefe desperdició: de hecho, se pasó todo el debate puntualizando a su oponente y bufando con exasperación o risas sarcásticas a cada argumento o dato que consideraba falso.

 Tengo la sensación que ese aire de autenticidad, indignación incluida, le habrá llevado a ganarse a algunos independientes e indecisos pero sobre todo, eso sin duda, habrá motivado a muchos de los "decepcionados". Con su actuación de ayer, Biden ha movilizado a muchos demócratas que se quedaron fríos con la última actuación del presidente. Su candidatura ha salvado un match ball, pero sólo Obama puede dar el golpe definitivo en los dos debates que aún tiene por delante.

De propina: las dos encuestas instantáneas entre votantes independientes dan ganador a Biden (CBS Biden 50% Ryan 31%. CNN/ORC Biden 48% Ryan 44%.

La bola de cristal: este martes debate presidencial. El formato "town hall", con preguntas directamente de los votantes, siempre da lugar a momentos originales y candidatos en aprietos. Será el más interesante de todos.

jueves, 11 de octubre de 2012

Un respiro para Obama y el debate de esta noche

El vicepresidente Joe Biden tiene esta noche una cita importante. En su debate con el candidato republicano a quitarle el puesto, Paul Ryan, lo único que necesita hacer es no convertirse en un nuevo problema para el presidente Obama. Parece por las encuestas de los estados clave, que el electorado empieza a olvidar o a relativizar la desastrosa actuación presidencial en el debate de la pasada semana. Veamos los datos:

Colorado
Romney 48%, Obama 47% (CBS/NYT/Quinnipiac)

Florida

Obama 47%, Romney 46% (NBC/WSJ/Marist)
Obama 49%, Romney 45% (University of North Florida)

Michigan

Obama 49%, Romney 42% (Detroit News)
Obama 46%, Romney 44% (Gravis)


Nevada

Obama 47%, Romney 45% (Suffolk)
Obama 47%, Romney 46% (SurveyUSA)
Obama 51%, Romney 47% (Public Policy Polling)

Ohio

Obama 51%, Romney 45% (NBC/WSJ/Marist)
Obama 45%, Romney 44% (SurveyUSA)
Obama 46%, Romney 42% (Newsmax/Zogby)

Virginia

Romney 48%, Obama 47% (NBC/WSJ/Marist)
Obama 51%, Romney 46% (CBS/NYT/Quinnipiac)


Wisconsin

Obama 50%, Romney 47% (CBS/NYT/Quinnipiac)
Obama 51%, Romney 49% (Rasmussen)

New Hampshire: Obama 48%, Romney 48% (Rasmussen)

Pennsylvania

Obama 51%, Romney 46% (Rasmussen)
Obama 50%, Romney 42% (Philadelphia Inquirer)



Son datos publicados en los dos últimos días que señalan que el camino hacia la victoria de Obama es aún posible y probable, pero tal vez por eso el debate de esta noche entre vicepresidenciables es aún más importante. La candidatura demócrata ya ha demostrado que es capaz de sobrevivir a un desastre, pero sería conveniente no ponerla a prueba mucho más si es que Obama no tiene intención de abandonar su vivienda actual.

De propina: según una encuesta de Pew Research el 40% cree que Paul Ryan ganará el debate de esta noche y sólo un 34% apuesta por el demócrata Joe Biden. Malas noticias... para Ryan. 

La bola de cristal: A Sarah Palin (sí, sigue viva) le han preguntado hoy si se presentará alguna vez a la presidencia. ¿Su respuesta?: "Qué sera, será". A pesar del guiño hispano, yo soy de los que pienso que está acabada en política a pesar de su juventud. No se ha organizado bien.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Seguimos a vueltas con el debate: mal para Obama

Ya ha pasado una semana completa desde que Mitt Romney vapuleó a Obama en el primer debate de la temporada y aquí seguimos, sin hablar prácticamente de otra cosa. Lo inesperado de la pifia presidencial, la resurrección de Romney, el vuelco en las encuestas... Una semana entera sin cambiar el tema y eso es, evidentemente, una noticia terrible para el presidente. En lugar de darle la vuelta a la conversación, que es lo que debía hacer, Obama ha ofrecido hoy su particular y breve explicación de la naturaleza del desastre: "Creo que fui demasiado educado". Señor, qué error.

Y digo error no sólo porque con sus palabras prolonga una discusión que no le beneficia en absoluto, sino también porque si esa es la única lección que ha extraído de su cara a  cara en Denver, es que no ve la realidad de manera clara. No fue la educación, fueron las ganas... Eso a pesar de que muchos obamistas tienen todas la razón cuando dicen que Romney mintió como un bellaco durante todo el debate, como prueba este video (ENG) recopilado por Daily Kos en el que Romney debate consigo mismo.



Con todo, por mucho esfuerzo que haga Obama ya no puede ganar el debate que perdió hace una semana, así que debería mejor concentrarse en las siguientes metas. La primera e inmediata será mañana por la noche, el debate vicepresidencial entre Joe Biden y Paul Ryan desde el Centre College de Kentucky. El siempre rebelde Biden tendrá que esforzarse por salir mejor parado que su rival y siendo dos personas brillantes, yo espero grandes cosas de la cita. Normalmente el duelo de los 'número 2' no levanta mucha expectación pero el precedente sentado por Romney ha hecho que este año estemos más atentos. Algún periodista, como siempre dados a magnificar, ya lo ha llamado: "El debate vicepresidencial más importante de la historia".

De propina: seguimos muy pendientes de la evolución de las encuestas en los estados clave. Se empieza a moderar la caída de Obama que se mantiene líder, aunque por poco, en los dos estados que a mí me parecen más cruciales: Ohio y Florida.

La bola de cristal: Romney a por los independientes: ahora dice que no cambiará leyes sobre aborto. Su campaña dice que sí... Otro reverso, aunque no creo que los conservadores le pasen factura tan cerca de las elecciones. Se tragarán el sapo.

viernes, 5 de octubre de 2012

Buenas y malas noticias para Obama (Encuestas, paro y donaciones)

No es que haya sido una buena semana para el presidente Obama. Una buena actuación en el debate del miércoles habría supuesto casi sellar la victoria, pero su mala actuación ha supuesto una resurreción política para Mitt Romney. Resurrección que ya se ve en las encuestas de los estados decisivos, que Obama ha liderado desde hace mucho con pequeños márgenes pero siempre en cabeza. Hoy el panorama ha cambiado:

Ohio:
(We Ask America) Romney 47%, Obama 46%
(Rasmussen) Obama 50%, Romney 49%

Florida:
(We Ask America) Romney 49%, Obama 46%

Virginia:
(Rasmussen) Romney 49%, Obama 48%
(We Ask America) Romney 48%, Obama 45%

Estas son las encuestas del día después del debate, por lo tanto las más afectadas por las imprrsiones inmediatas de los que lo vieron, por lo que es probable que Romney pierda algo de terreno en las siguientes. Eso es un pobre consuelo para Obama, pero seguro que encuentra mucho más alivio en dos noticias que ha recibido hoy: su campaña ha recaudado más de 181 millones de dólares en el mes de agosto, el récord absoluto de esta temporada electoral. Pero luego está la mejor de todas, el desempleo bajó al 7,8% tras la creación de 114.000 empleos. No sólo se trata de la cifra más baja de su mandato, también significa romper la barrera psicológica del 8%.

De propina: gracias a todos los que visitasteis el blog ayer y anteayer... récord absoluto de visitas :)

La bola de cristal: lo mismo es cosa mía, pero después de ver el mitin de Obama ayer en Colorado creo que el desastre del debate lo ha despertado... Preveo un gran duelo para el siguiente.

jueves, 4 de octubre de 2012

Romney gana. Obama, céntrate

Creo que todos tenemos muy claro que cuando eres presidente, el tiempo que puedes dedicar a prepararte es mucho menos que si eres un simple candidato entregado en cuerpo y alma a la campaña y sólo a la campaña. Pero de ahí a que se note tanto....he visto a un Obama absolutamente descentrado, siempre largo, sin fortaleza y que además ha dejado pasar una y otra vez oportunidades de asestar buenos golpes. El electorado no es siempre previsible, pero en mi opinión hoy las cosas han debido igualarse porque Mitt Romney ha estado francamente mucho mejor. Lo notará en las encuestas y en la cuenta bancaria.

Romney ha conectado, ha contado historias de votantes de verdad, se ha defendido de lo que consideraba mentira, mientras que el presidente daba la impresión de querer quitarse el asunto de encima lo antes posible. De manera increible ha renunciado a toda mención del comentario del 47% y ha pecado de una total falta de claridad... Sé que suena difícil de creer, pero creo que ha sido más que otra cosa cuestión de ganas. Obama ha dejado buenos argumentos, pero mal articulados y nunca finalizados. La actitud se ha filtrado al lenguaje corporal: el republicano parecía lleno de energía y el presidente muy cansado. Enfadado tal vez... La mirada titubeante, lejos de la cámara. No era un problema de razonamiento: la canción era buena, pero el cantante ha estado muy por debajo.

En una cosa desde luego tengo que darle la razón a Obama, me ha parecido un debate excelente. Nada o casi nada de golpes bajos, afabilidad, dos posturas bastantes claras... Ojalá por aquí viéramos cosas que se parecieran en algo.

De propina: cuando leáis esto mañana, tal vez resulte que he visto un debate completamente diferente de los demás y he sacado conclusiones erróneas, pero son las mías. Podéis ponerme verde en los comentarios.

La bola de cristal: unas presidenciales no son sólo sustancia... El presidente debería tener cuidado porque si algo no perdona el electorado es que n candidato no parezca querer la victoria com todas sus fuerzas. Lo dicho, puedo equivocarme, pero yo me prepararía para unas encuestas más ajustadas y los consiguientes artículos de "Mitt Romney resucita"


miércoles, 3 de octubre de 2012

El debate Obama-Romney de esta noche, en twitter

Desde un poco antes de las 3am hora peninsular española (9pm EST), estaré tuiteando el primer debate presidencial Obama-Romney desde mi cuenta personal @carlos_hem. Uniros a la charla y nos divertimos!!

sábado, 29 de septiembre de 2012

Debates: la fase decisiva

Ni siquiera los partidarios más convencidos de Mitt Romney pueden negar que, hoy por hoy, la dinámica de esta carrera electoral se encamina hacia la reelección de Obama. Pero del mismo modo, ni siquiera el más entusiasta y optimista partidario de Obama debería dejar de darse cuenta de que algo va a pasar, tiene que pasar, en los próximos días. Primero porque los medios de comunicación no van a consentir que el gran culebrón de cada cuatro años se decida así sin más cuando falta todavía un mes para ir a la urnas; y segundo porque el equipo de Mitt Romney va a dedicarse en cuerpo, alma y dinero (mucho dinero) a asegurarse un modo de darse una sacudida a la campaña.

La oportunidad perfecta para que se genere ese estado de opinión de "el regreso de Romney" está en los debates. De hecho, más que la oportunidad perfecta es hoy por hoy la única oportunidad, más allá de desgracias imprevistas y sorpresas de mal gusto. Romney necesita una gran gran gran actuación en los debates, preferentemente en el primero de ellos que se celebrará el próximo miércoles en Denver, Colorado, un estado que sigue bastante disputado por cierto.

Los debates son siempre interesantes, lo que me gusta menos es el irritante jueguecito de las expectativas durante los días anteriores. Esos intentos burdos de decir que tu pobre candidato es casi analfabeto mientras que el otro es un orador que deja a Lincoln pequeño. No me entendáis mal, ese juego es una táctica política fundamental para ganar un debate, es sólo que resulta cada vez más difícil de creer. Eso sí, hasta que llegue la propia noche electoral, estos días serán la única oportunidad para ver a los candidatos alabándose el uno al otro.

Y sin embargo los dos ya han perdido el juego de sentar las expectativas más bajas. Por un lado Obama, con su bien merecida fama de fantásticos orador, no puede escapar del hecho de que los votantes ya saben de lo que es capaz y que por tanto no importa cuánto intente redefinirse. Por otro lado Romney tiene unas expectativas altísimas no tanto por sus propias cualidades como "debater" sino porque para él la cita es a vida a muerte. No le vale un empate ni un largo combate a los puntos, necesita un KO para darle la vuelta a esta elección que no le va por buen camino. Para ello cuenta con tres asaltos, tres. Tres debates que decidirán quién va a ganarse un despacho en la Casa Blanca para los próximos cuatro años.

De propina: no hay que dejar de recomendar la excelente cobertura en español de estas presidenciales que hace Antxón Garrogerrikabeitia en Dos Cero Doce.

La bola de cristal: es evidente que la dinámica Obama-Romney tiene una influencia, pero sigo sorprendido por la posibilidad de que los republicanos no consigan retomar el Senado en las próximas elecciones. Yo casi lo daba por seguro pero fiascos como el de Todd Akin lo están poniendo difícil.

domingo, 23 de septiembre de 2012

El 47% contra el 14%

Septiembre ha sido un mes terrible para Mitt Romney. Desastroso, sin paliativos. Ha habido más tropiezos, pero ninguno como este devastador vídeo que ha sacado a la luz Mother Jones en el que Romney se sincera ante un selecto grupo de 'grandes donantes' sin saber que alguien le está grabando. La principal perla es:
"Hay un 47% de personas que votará al presidente sí o sí. Bien, hay un 47% que están con él, que dependen del Gobierno, que se creen víctimas (...) son los mismos que no pagan impuesto sobre la renta. No es mi trabajo preocuparme por esa gente. Nunca voy a convencerles de que deberían hacerse responsables de sus vidas"
Ufff. Partamos de la base de que es difícil ganar una elección poniéndose frente por frente a casi la mitad de la población, pero más allá, este gaffé es uno de esos "golpes perfectos". El peor escándalo para un político, dice la tradición, esaquel que viene a confirmar una sospecha que el electorado ya tenía. En el caso de Romney, si algo saben de él los votantes es que es un multimillonario, alejado de las preocupaciones de la clase media. Es un regalo para la campaña de Obama.

Así que en plena tormenta y para atajar esa cifra del 47%, Romney ha incorporado una nueva cifra al debate: la del 14,1%. Es el porecntaje de sus ingresos que pagó Mitt Romney en 2011, un total de 14 millones de dólares. Ha hecho públicos los datos después de varios meses resistiéndose y en parte como cortina de humo para distraer atención de su última metedura de pata. ¡Cómo estará la cosa para que quiera que se hable de sus millones, en cualquier cosa, ambas cifras son las dos caras de la misma moneda: la que permite a los demócratas retratar a Romney como un millonario que paga menos porcentaje de impuestos que un fontanero y que considera a los pobres unos llorones. En eso se lo está poniendo fácil.

Sin embargo, pese a la avalancha de análisis a izquierda y a derecha que ya dan por muerto políticamente a Romney, yo no puedo estar de acuerdo. Con mes y medio y tres debates de por medio, sólo un loco puede pensar que el resultado está sellado. Cierto que Obama lleva cierta ventaja tanto en el voto general como en los estados clave, pero aunque las diferencias son reiteradas también son escasísimas. Todavía queda batalla.

De propina: por cierto que Romney no ha rectificado más que para decir que se "expresó pobremente", pero sí que se suavizó en una entrevista en Univisión que tuvo mucha historia interna: su campaña obligó a la universidad a suspender su regla de que sólo acudieran estudiantes y llenó el auditorio con partidarios traídos en autobuses. Luego obligó a grabar de nuevo la introducción de los presentadores porque no le gustó que señalaran que Obama les había concedido más tiempo... Lo cuenta Buzzfeed.

La bola de cristal: ¿Queréis que os detecten la tendencia política usamericana? Aquí podéis hacerlo.


viernes, 14 de septiembre de 2012

Cambio de ritmo

Lo llaman "sorpresa de octubre", pero este año ha llegado un poco antes. Es ese suceso inesperado e impredecible que pone a prueba la cintura de los candidatos. Algunas de estas sorpresas logran cambiar la dinámica general de la campaña mientras que otras, la mayoría, se quedan en poco más que tardías tormentas de verano.

Ya tenemos la de este año, o al menos la primera de ellas: la ola de odio antiestadounidense provocada por una película que denigra la figura del profeta Mahoma. Un estallido que se ha llevado por delante entre otros al embajador estadounidense en Libia. Por supuesto, como a un mes y medio de las elecciones no hay asunto que quede fuera de la contienda, el equipo de Mitt Romney ha aprovechado la oportunidad para criticar la 'debilidad' de Obama por 'simpatizar' con los atacantes a legaciones estadounidenses. Y así, de repente, la política exterior que había permanecido totalmente ausente en esta campaña, ha pasado a primer plano.

Cierto es que la primera valoración de Romney llegó antes de que trascendiera la muerte del embajador, pero incluso entre sus compañeros de partido sus críticas han sido recibidas con cierta frialdad, con varios pesos pesados de la política exterior republicana negándose a unirse a ellas y quedándose sólo en el respetuoso recuerdo a las víctimas. Aun así, como Romney no puede permitirse cambiar de opinión por su pasado un tanto "voluble", el candidato se ha negado a dar marcha atrás, reitera su ataque y carga contra la prensa, lo que siempre ha sido una muy mala señal para una campaña.

Aun así, todavía están por ver las implicaciones de la noticia. La postura ambivalente del gobierno Obama con respecto a la Primavera Árabe le puede pasar factura si mañana, día de la oración, las manifestaciones multitudinarias en varios paises islámicos vuelven a teñirse de violencia contra las legaciones estadounidenses. Esto alteraría no sólo la importancia de la política exterior en campaña, campo en el que Romney tiene cero experiencia, sino el juicio de los votantes al respecto. Por primera vez en muchísimo tiempo, el público valora más al candidato demócrata que al republicano en materia de política exterior.

Esto trae dos posibles escenarios: por un lado un clima de amenaza exterior siempre, siempre, siempre favorece al presidente en el cargo: el electorado cierra filas con su comandante en jefe que además en este caso, ha sabido vender bien su mayor éxito en la materia, la muerte de Osama Bin Laden. Por otro lado, los demócratas siempre, siempre, siempre le parecerán al ciudadano medio más "blandos" que los republicanos y si Romney no es un halcón al uso, ni mucho menos, sí que ha cultivado una cierta imagen de fortaleza con su postura antagonista hacia Irán.

O un tercer escenario... Que las cosas se calmen y que en una país sacudido por la crisis, la gente vuelva pronto a preocuparse por su bolsillo y la la Economía retome su hasta ahora indiscutible primer puesto entre las preocupaciones. A mi entender, eso es lo más probable.

De propina: quien quiera saber más sobre el embajador Christopher Stevens le recomiendo este obituario (ENG) del Washington Post. Un superprofesional de la diplomacia que hablaba árabe y no tuvo miedo ninguno a colarse en un país en plena guerra civil.

La bola de cristal: seguro que Romney mira con esperanza a un mapa electoral en el que las encuestas dicen que todavía Virginia, Ohio y sobre todo Florida están tan a su alcance como al de Obama. Aún así a la vista del mapa electoral no parece fácil que se haga con la victoria. Más aún ahora que por primera vez desde abril, en el mes de agosto Obama y los demócratas lograron batir en recaudación de donaciones a Romney y los republicanos. Por si a alguien le interesa, han sido 114 millones $ contra 111.

lunes, 13 de agosto de 2012

Romney escoge a Ryan: gran político, mala elección

Paul Ryan reune todas las cualidades para ser un buen vicepresidente. En un panorama político lleno de charlatanes, si algo es seguro respecto al congresista de Wisconsin es que sabe de lo que habla. Es una autoridad en materia presupuestaria y hasta ahora se ha interesado más por el ingrato trabajo legislativo que los flashes y las posiciones de liderazgo. Todo eso es cierto, además de ser joven, popular y fotogénico; y sin embargo para mí Mitt Romney ha cometido un grave error eligiéndole.

Las mismas cualidades que harían de Ryan un gran vicepresidente, son también en parte las que lo convierten en un mal candidato. Cientos de votos polémicos en el congreso, sí, pero también los dos proyectos presupuestarios que ha redactado en la Cámara de Representantes y que le han ganado muchos enemigos. Su ataque frontal contra los programas de entitlement y especialmente Medicare le hacen antipático precisamente ante el grupo demográfico del que más dependen los republicanos: los jubilados. La gente mayor tiene muy presente la asistencia que les da Medicare y la Seguridad Social y sin duda no están muy tranquilos por la elección de Romney.

Este problema lo veía bien claro los asesores de la campaña republicana que desde un principio se opusieron a que fuera el elegido para viceprepresidente, pero la decisión final ha sido de Romney y en ella ha preferido al mejor hombre antes que al mejor candidato. Un estado absolutamente decisivo como Florida, bastante moderado y donde el voto de los mayores tiene una importancia capital, puede igualarse aún más por el "efecto Romney".

Además está un problema más de relaciones públicas que de otra cosa. Romney sigue negándose (grave error) a hacer públicas sus declaraciones de impuestos... y según el plan fiscal que redactó Ryan, un multimillonario como Romney apenas tendría que pagar un 0,82% en el impuesto sobre la renta. No luce muy bien, no.

De propina: el mejor colocado para ir de candidato a vicepresidente era el gobernador de New Jersey Chris Christie, pero aparentemente se negó a dimitir y dedicarse al 100% a la campaña.

La bola de cristal: una cosa es segura. El debate vicepresidencial de este año entre Biden y Ryan tendrá un gran nivel. Y si lo que quería Romney era huir del "efecto Sarah Palin", desde luego lo ha logrado con un candidato que tiene mucha chicha.

lunes, 6 de agosto de 2012

Obama vence en las encuestas y Romney en la recaudación

En una nueva decepción financiera para la Casa Blanca, hoy se ha sabido que la campaña de Obama y los demócratas han recaudado durante el mes de julio 75 millones de dólares en donaciones, sustancialmente por debajo de los 103 millones que lograron Mitt Romney y su partido. Es el tercer mes consecutivo en que las cosas quedan así y la campaña del presidente ya ve cerca el día en que pierda su superioridad financiera, con el riesgo que eso supone. En un momento en que la guerra publicitaria está en todo lo alto, la posibilidad de quedarse sin dinero antes que el otro da escalofríos a las campañas.

Las cifras hablan bien de la organización de Romney y del entusiasmo de los más ricos por ver a Obama fuera del 1500 de la avenida Pennsylvania.Sin embargo la decepción del Presidente se hace más dulce cuando mira a las encuestas. A pesar de tener buenos y malos días, a pesar de la incertidumbre económica y a pesar de todos los pesares, el presidente va por delante. Aunque sin diferencias enormes, el presidente encabeza la inmensa mayoría de las encuestas desde hace semanas. Más significativas todavía son las de los estados clave: el siempre decisivo Pennsylvania parace sólidamente demócrata esta vez, y Obama va por delante en prácticamente cada encuesta hecha en Ohio y Virginia. También, aunque menos, en Florida... Así que aunque la cosa sigue apretada, sí que parece que el presidente lleva de momento la mejor mano.

De propina: para que nos hagamos una idea de dónde se está librado la batalla, las campañas ya han gastado 350 millones en spots televisivos sólo en nueve estados: Colorado, Iowa, Nevada, New Hampshire, North Carolina, Ohio, Pennsylvania, Virginia y Florida.

La bola de cristal: Obama necesita mantener su éxito entre el electorado femenino y anuncios como éste, sobre la oposición de Romney a los anticoncepctivos, seguro que ayudarán. 

domingo, 22 de julio de 2012

El culebrón de los impuestos de Romney: por qué se niega a hacer pública su declaración

Cualquier observador de esta campaña ya se habrá dado cuenta. Parece que en eeste largo verano de caza del votante no se habla de otra cosa que no sea dinero. De la inquietud que le provoca a Obama ir por debajo de su rival en donaciones, pero sobre todo de cúanto tiene, cuánto gasta y cuánto paga el republicano Mitt Romney. Es el culebrón del verano: ¿Por qué Romney no hace pública su declaración de impuestos cómo suelen hacer los candidatos? La especulación es imparable. Los sabios del politiqueo dicen que negándose a publicar la información lo único que hace es provocar que la gente se imagine lo peor, y que por tanto si aún así no quiere hacerlo, debe ser verdad que hay cosas terribles en su declaración de impuestos. Mientras, el candidato guarda silencio y la bola va engordando.

 Mi opinión personal es que Romney acabará por ceder a la presión y publicará la información, pero no resulta difícil imaginar por qué se resiste. En primer lugar, incluso en un país tan enamorado de la prosperidad como Estados Unidos, resulta difícil simpatizar con un candidato cuyos ingresos probablemente estén alrededor de los 20 millones de dólares. Luego están además el tipo de cosas que uno hace cuando tiene esas cantidades de dinero: que sepamos una cuenta en Suiza, tal vez otras en las Islas Caimán y alguna que otra sopresa que puede no quedar muy bien en el currículum.

Para Romney es una de esas situaciones en las que no tiene nada que ganar y sí mucho que perder. Si sigue negándose a hacer públicos los datos, pierde, si los revela, pierde también. Además de su evidente riqueza y las posibles prácticas poco éticas, estarán los inevitables titulares sobre sus contribuciones a la Iglesia Mormona que podrían acercarse a los 4 millones anuales, una faceta que el candidato estaría feliz de no resaltar mucho. Eso sin contar con que una persona con sus recursos puede permitirse un carísimo asesor fiscal que conozca cada centímetro de la ley y por tanto, aún sin salirse de ella, le permita pagar lo menos posible. Si a través de trampas legales paga un 1%, eso tampoco caería muy bien en una opinión pública castigada aún  por la crisis.

El candidato se marcha esta semana de viaje internacional con paradas en los dos principales aliados de Estados Unidos: Gran Bretaña e Israel. Así potenciará su imagen "presidencial" y tal vez se librará de un poco de presión, aunque el asunto de su declaración de impuestos estará esperándole cuando vuelva.

De propina: una encuesta de Latino Decisions confirma el desastre de Romney con el voto hispano. Un 22% lo apoya a él en comparación con el 70% que apuesta por el presidente. Eso son diez puntos menos que el ya desastroso resultado de McCain en 2008.

La bola de cristal: pero que nadie se engañe, la cosa va a estar reñidísima. La última encuesta de NPR muestra a los dos candidatos muy empatados en los doce estados que decidirán la elección: A new NPR poll in 12 battleground states -- Colorado, Florida, Iowa, Michigan, Nevada, New Hampshire, New Mexico, North Carolina, Ohio, Pennsylvania, Virginia y Wisconsin.

viernes, 29 de junio de 2012

La Corte Suprema le da un respiro a Obama: su reforma sanitaria es constitucional

Cualquier observador de esta campaña ya se habrá dado cuenta. Parece que en eeste largo verano de caza del votante no se habla de otra cosa que no sea dinero. De la inquietud que le provoca a Obama ir por debajo de su rival en donaciones, pero sobre todo de cúanto tiene, cuánto gasta y cuánto paga el republicano Mitt Romney. Es el culebrón del verano: ¿Por qué Romney no hace pública su declaración de impuestos cómo suelen hacer los candidatos? La especulación es imparable. Los sabios del politiqueo dicen que negándose a publicar la información lo único que hace es provocar que la gente se imagine lo peor, y que por tanto si aún así no quiere hacerlo, debe ser verdad que hay cosas terribles en su declaración de impuestos. Mientras, el candidato guarda silencio y la bola va engordando.

 Mi opinión personal es que Romney acabará por ceder a la presión y publicará la información, pero no resulta difícil imaginar por qué se resiste. En primer lugar, incluso en un país tan enamorado de la prosperidad como Estados Unidos, resulta difícil simpatizar con un candidato cuyos ingresos probablemente estén alrededor de los 20 millones de dólares. Luego están además el tipo de cosas que uno hace cuando tiene esas cantidades de dinero: que sepamos una cuenta en Suiza, tal vez otras en las Islas Caimán y alguna que otra sopresa que puede no quedar muy bien en el currículum.

Para Romney es una de esas situaciones en las que no tiene nada que ganar y sí mucho que perder. Si sigue negándose a hacer públicos los datos, pierde, si los revela, pierde también. Además de su evidente riqueza y las posibles prácticas poco éticas, estarán los inevitables titulares sobre sus contribuciones a la Iglesia Mormona que podrían acercarse a los 4 millones anuales, una faceta que el candidato estaría feliz de no resaltar mucho. Eso sin contar con que una persona con sus recursos puede permitirse un carísimo asesor fiscal que conozca cada centímetro de la ley y por tanto, aún sin salirse de ella, le permita pagar lo menos posible. Si a través de trampas legales paga un 1%, eso tampoco caería muy bien en una opinión pública castigada aún  por la crisis.

El candidato se marcha esta semana de viaje internacional con paradas en los dos principales aliados de Estados Unidos: Gran Bretaña e Israel. Así potenciará su imagen "presidencial" y tal vez se librará de un poco de presión, aunque el asunto de su declaración de impuestos estará esperándole cuando vuelva.

De propina: una encuesta de Latino Decisions confirma el desastre de Romney con el voto hispano. Un 22% lo apoya a él en comparación con el 70% que apuesta por el presidente. Eso son diez puntos menos que el ya desastroso resultado de McCain en 2008.

La bola de cristal: pero que nadie se engañe, la cosa va a estar reñidísima. La última encuesta de NPR muestra a los dos candidatos muy empatados en los doce estados que decidirán la elección: A new NPR poll in 12 battleground states -- Colorado, Florida, Iowa, Michigan, Nevada, New Hampshire, New Mexico, North Carolina, Ohio, Pennsylvania, Virginia y Wisconsin.

lunes, 25 de junio de 2012

Todos pendientes de la Corte Suprema: la Reforma Sanitaria al borde del precipicio

Después de mucho dar vueltas, por fin ha llegado la semana decisiva. En cuestión de días, si no horas, la Corte Suprema hará pública su decisión sobre la reforma Sanitaria de Obama. Si es constitucional o no, qué partes lo son y cuáles no... en particular la medida clave: saber si el gobierno federal puede legalmente exigir a los ciudadanos que se aseguren.

La reforma sanitaria no es sólo el único gran logro legislativo de Obama en su primer mandato, además es una conquista que los demócratas han perseguido durante décadas. Nadie duda que sea cual sea la decisión tendrá importantes consecuencias en la campaña y en las elecciones pero, ¿cúales?

Si la Corte dice sí a la reforma se entiende que el presidente saldrá fortalecido, consolidando su gran victoria legislativa. Por otro lado no queda duda de que una decisión así enfurecerá a las bases conservadoras, movilizando el voto y la recaudación de Romney. El candidato republicano tendría así una promesa concreta tras la que todo el partido, moderado o conservador, puede unirse: derogar la reforma sanitaria.

Si la Corte dice no a la reforma Obama perderá una de las principales cualidades de un presidente, el aparecer como "un líder fuerte". Además tendrá poco que presumir de lo que ha hecho con sus cuatro años en la Casa Blanca, ya que los jueces le habrían arrebatado su principal logro. Por supuesto un rechazo de la Corte sacaría a la calle con pancartas a todos los liberales algo desencantados con Obama, permitiéndole más recaudación y movilización electoral.

Aunque cualquier decisión tendrá algo bueno y algo malo para los candidatos, este no es un juego de suma cero y yo creo que a un presidente en ejercicio lo peor que le puede pasar electoralmente es parecer débil. Ahí lo dejo.

De propina: como aperitivo la Corte nos ha dejado hoy otra decisión trascendental. Declara inconstitucional y por tanto elimina la mayor parte de la restrictiva ley migratoria de Arizona. Sin embargo una de sus disposiciones más polémicas, la que permite a la policía pedir los papeles a cualquier personas que parezca "sospechosa", ha sobrevivido al escrutinio de la justicia. Victoria agridulce para la comunidad hispana.

La bola de cristal: se rumorea que es el presidente de la Corte, John Roberts, el que está redactando la sentencia. Malos augurios para Obama ya que Roberts es desde luego un conservador, pero sorpresas te da la vida...

jueves, 21 de junio de 2012

Obama moviliza el voto latino dando papeles a los 'dreamers''

En las presidenciales de 2008 Obama ganó el 67% del voto latino, que además resultó clave para que ganara estados como Colorado o New Mexico. De cara a 2012 siempre habría sido extraño que no se lo llevara de nuevo el voto hispano, pero la clave es cuántos se acercarán a votar, la siempre comentada movilización. Tras un primer mandato algo decepcionante, la Casa Blanca temía que muchos se quedaran en casa el día de la elección.

Por eso Obama ha decidido soltar una bomba a cinco meses de las elecciones: ya no se deportará a los jóvenes inmigrantes ilegales que llegaron al país de niños. Se les dará un permiso de trabajo. La condición es que no tengan antecedentes penales, lleven al menos cinco años en el país, sean menores de 30 años y hayan estudiado bachiller o servido en las fuerzas armadas. La medida es una vieja reivindicación de la comunidad hispana que recoge la llamada Dream Act, un proyecto de ley que lleva atascada en el Congreso desde 2001. Obama ha decidido tomar un atajo y fastidiar un poco a los republicanos a la vez que hace las paces con la comunidad hispana.

El presidente espera hacerse perdonar no sólo el incumplimiento de impulsar una reforma migratoria en profundidad, sino también el hecho de que sólo en el último año su gobierno ha batido todos los récords deportando a más de un millón de inmigrantes sin papeles. Se calcula que la medida beneficiaría a unos 800.000 jóvenes,que obviamente no pueden votar, pero el impacto en el resto de la comunidad puede ser enorme. De momento parece que esta pequeña amnistía ya está dando rédito: según una encuesta un 49% de los hispanos están ahora más entusiasmado con Obama.

De propina: tal vez lo mejor que saca Obama de todo esto es terminar por fin con dos semanas de malas noticias que habían llevado el desánimo a su campaña. Eso y poner a Mitt Romney a la defensiva, que no está mal.

 La bola de cristal: a los fanáticos de las encuestas les diremos que el mes pasado Obama

miércoles, 20 de junio de 2012

22.222

Estoy preparando un post sobre la última ofensiva de Obama para atar bien atado el voto hispano, o más bien para movilizarlo, pero antes quería compartir con vosotros una curiosisdad. En el último año el Diario de USAmérica ha tenido 22.222 visitas. Ya es casualidad abrir las estadísticas y encontrarte una cifra así de redonda... No representa más que eso, una simple coincidencia, pero también una oportunidad para dar las gracias a todos los que, aunque sea por casualidad, visitan este blog. Sois los mejores.

viernes, 15 de junio de 2012

El discurso económico de Obama y unos detalles

Obama dio ayer el gran discurso económico en Ohio del que hablábamos ayer. Aquí os lo dejo no sin comentar antes que según una encuesta de Gallup un 68% aún culpa a George W. Bush por la situación económica. Buenas noticias para Obama justo en el momento en que su campaña parece dar un giro en la estrategia: identificar a Mitt Romney con las políticas republicanas de los años previos a la crisis. Os dejo el discurso de Obama y también un nuevo anuncio de Mitt Romney que condensa muy bien su línea de ataqyue económica: "¿cómo puede Obama decir que las cosas van bien?




De propina: el domingo Mitt Romney tiene entrevista con Bob Schieffer en CBS... Las entrevistas en los programas políticos del domingo son siempre un reto difícil, pero además es la primera vez que sale en uno de ellos que no sea el de FOX News desde que empezó la campaña.

La bola de cristal: y mientras tanto todos pendientes de la decisión trascendental de la Corte Suprema sobre si es legal o no la reforma sanitaria... un tema clave para las elecciones y para el que, sea cual sea el resultado, ya se preparan las dos campañas.

jueves, 14 de junio de 2012

Obama intenta salir a flote con un gran discurso económico

Será dentro de unas horas y será en Ohio, un estado clave que está sufriendo mucho la crisis. El presidente Obama encarará el mayor de sus problemas con su herramienta favorita, un discurso. Todo indica que no se centrará tanto en medidas nuevas como en transmitir un mensaje mucho más simple: denme cuatro años más para arreglar esto. Intentará explicar que recibió la economía en un estado de tal calamidad que, aunque se han hecho progresos, no era posible hacer mucho más. Una estrategia peligrosa en mi opinión, por dos motivos:

En primer lugar, el argumento de la herencia recibida tiene un recorrido limitado; un año seguro, dos tal vez, pero cuatro... Yo creo que la gente no tienen una memoria tan larga y juzga a un presidente por sus méritos. En segundo lugar, creo que esta táctica puede salirle por la culata. Si la campaña empieza a decirle a la gente que las cosas están mejoran, que la economía no va tan mal, corre el riesgo de provocar una reacción airada en el estilo de ¡Cómo que no va a tan mal! ¿Qué me importa a mí que se creen unos miles de empleos cada mes si sigo en paro. Ese tipo de cosas en campaña son gasolina pura.

Por supuesto Obama es Obama, es decir, un magnífico orador que puede hacer hoy un discurso memorable que inspire a cientos de miles y salve su pellejo. No sería la primera vez... ya desactivó la bomba de del reverendo Jeremiah Wright la pasada campaña con su discurso sobre las relaciones entre razas. Todo es posible pero al final, lo más probable es que el discurso sea estupendo y aún así la gente vuelva a casa y se de cuenta de que todo sigue igual. Mitt Romney ya lo ha anticipado: "Mi opinión personal es que será muy elocuente pero las palabras se las lleva el viento, y que la trayectoria un individuo es la base sobre la que se debe juzgar si debe seguir o no en su puesto". Aunque ojo, que Obama también ha dejado un recado para Romney: "Quiero que prestéis atención durante los próximos cinco meses y veáis si proponen una sola cosa que no intentaran cuando estaban en el poder, porque no encontraréis ninguna"

De propina: curioso lo que señala Jon Avlon. Romney nació en Michigan, fue gobernador de Massachusetts y tiene casa en California. "Tiene" tres estados y sin embargo sería un milagro que ganara uno solo de ellos. No debe importarle porque las encuestas le van cada vez mejor.

La bola de cristal: dice el excandidato Gingrich que las elecciones no son justas porque los ricos pueden gastar mucho, cosa que no parecía importarle cuando el millonario Sheldon Adelson le entregó más de 11 millones la pasada campaña. En esta elección la influencia de los superricos va a ser espectacular, mucho mayor que en las últimas décadas.

viernes, 8 de junio de 2012

La guerra del dólar: Romney planta cara

Durante los últimos cinco años, la peor pesadilla de los estrategas republicanos ha sido la monstruosa capacidad de Obama para recaudar dinero. En la pasada elección batió todos los récords no sólo entre los grandes donantes, sino ampliando enormemente la base de personas que iban donando 15 o 20 dólares cada vez que les era posible. John McCain no pudo ni acercarse a sus niveles de recaudación y lo pago bien caro, pero eso no va a pasarle a Mitt Romney. Su campaña ha anunciado que entre ella misma y el partido republicano han recaudado 76 millones de dólares durante el mes de mayo, bien por encima de los 60 del presidente y en DNC. Es una señal evidente de que el establishment republicano empieza a vislumbrar una posibilidad de ganar y por tanto están dispuestos a meter dinero en el asunto. Está claro que hay mucha gente molesta con Obama y que algunos tienen mucho dinero, pero esta diferencia de recaudación a estas alturas del año no presagia nada bueno. La campaña del presidente no ha desvelado cuánto dinero tiene "ahorrado" en cuenta, que es probablemente suficiente como para mantener su superioridad financiera, pero debe ponerse las pilas con la recaudación o empezarán a surgir artículos en los periódicos del estilo de "problemas en la campaña", "los donantes dan la espalda a Obama", "por qué ya no le quieren como en 2008". Ese tipo de cosas. De propina: según la última encuesta de NYT/CBS nada menos que 7 de cada 10 estadounidenses quieren que la Corte Suprema declare ilegal la Reforma Sanitaria de Obama. Da que pensar... un rechazo casi absoluto al mayor logro legislativo del mandato de Obama. La bola de cristal: interesante artículo que detalla cómo Obama pagaría muchos más impuestos acorde a su plan fiscal y Romney muchos menos con el suyo. Cosas de ser rico... aunque estoy convencido de que gane o pierda, Romney acabará el año con la cuenta bancaria mucho más delgada. Tiene que invertir en su propia campaña.

domingo, 3 de junio de 2012

El mal dato de paro complica el futuro de Obama

El paro decreció en 69.000 personas en el mes de mayo, lo que hizo que el índice de desempleo subiera una décima hasta el 8,2%. La cifra que sería celebrada con fuegos artificiales en España es en realidad una pésima noticia para el presidente Obama que encara los últimos cinco meses antes de las elecciones. La inacabable crisis europea mina la confianza a nivel mundial y debilita aún más la lenta recuperación que vive Estados Unidos. Si su rival fuera un ideólogo del conservadurismo social tal vez podría solventarlo, pero Mitt Romney se presenta ante los votantes con un currículum de buen gestor que es exactamente lo que el país busca. Por supuesto Romney está dispuesto a aprovechar la oportunidad y ya ha dicho que el último dato de paro es una "Noticia devastadora para los trabajadores y las familias americanas". Para sus posibilidades electorales, lo cierto es cuanto peor vaya todo, mejor. La Casa Blanca, por su parte, ha reaccionado recordando que es el 27 mes consecutivo en que se crea empleo en vez de destruirse, y ha presionado al Congreso para que tome cartas en el asunto. La campaña del presidente trata de insistir en la idea de que el Romney empresario fue un destructor de empleo y que las políticas que propone son las mismas que trajeron la crisis... un argumento que palidece ante la realidad de una economía que no acaba de ir hacia delante. Para ganar necesitará algo más de buenos datos económicos y algo menos de retórica de aquí a noviembre. De propina: interesante el modo en que Donald Trump se vuelve a colar en el debate electoral, oscureciendo de paso a Romney, para insistir en levantar dudas sobre el lugar de nacimiento de Obama. Ni su certificado original de nacimiento ha valido para acallar a la madre de todas las teorias conspiratorias. Falsa, por cierto. La bola de cristal: Obama ligeramente por delante en las encuestas nacionales, irrelevantes a estas alturas. Aún así, preveo cambios en las próximas semanas.

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