Va a ser todo un martes éste. En condiciones normales, las elecciones primarias son un evento muy aburrido cuando entre los competidores hay senadores en ejercicio. Suelen pasarse por la convención estatal a recoger automáticamente su nominación y recibir aplausos. Lo que pasa es que este año el mundo político anda muy revuelto. Existe una ira subterránea contra todo lo que suene a Washington y los candidatos del establishment lo están pasando mal por vez primera en años.
Es el caso concreto de Blanche Lincoln, la senadora demócrata de Arkansas. No parece que vaya a tener problemas para ganar hoy pero la cuestión es si superar el 50% de los votos y evitar así una segunda vuelta. Aún así, quién habría dicho que iba a tener una primaria competida después de 12 años en la cámara iba a jugarse la vida política en las primarias de su propio partido.
Más difícil lo tiene el ex-republicano y ahora demócrata Arlen Specter: tras siglo y medio siendo el republicano centrista del Senado, su paso a convertirse en el demócrata centrista del Senado no va muy bien. Tiene una primaria difícil contra el congresista Joe Sestak, un "demócrata de toda la vida" que ha esperado paciéntemente su turno y no tiene intención alguna de dejarle el camino libre aunque ahora compartan partido. Specter podría perfectamente perder la nominación demócrata pero parece que se presentaría como independiente en la general, abriendo una batalla a tres a la que se sumaría el republicano Pat Toomey.
Lo dicho, un año de disgustos para la gente que ya está en Washington. Que se lo pregunten al senador republicano Bob Bennet, de Utah, que ha perdido su primaria por goleada frente a un ultraconservador y ahora no sabe qué hacer. O si no al demócrata Alan Mollohan, que ha perdido su primaria tras treinta años en su escaño. Este año la asociación con el partido es más una lacra que una ayuda: Trey Grayson trato de hacerse el candidato del establishment en Kentucky para lograr un asiento en el Senado. Lo consiguió, pero va camino de perder frente a otro conservador estilo Tea Party, el probable senador Rand Paul.
Interesante como Kirsten Gillibrand tiene casi asegurada su SILLA en NY, después de todo ella no representa al NY urbano, y ultra Liberal que es NYC.
ResponderEliminarCreo que son muy democratas en ese estado y votan mas por el partido creo.
Aunque bueno ella es un buen elemento en virtud de que no es tan liberal (blue dog jeje)