jueves, 5 de marzo de 2009

Y eso que sólo han sido seis semanas


La diferencia salta a la vista... El antes y después de Obama, antes y después de empezar en su nuevo trabajo. El peso de la presidencia tiene una consecuencia física evidente: sienes grises y distinguidas de reciente creación. Ha llegado la hora de las canas, los días relajados del Senado han terminado. ¿Qué dirá Michelle?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Amigos de El Diario